En el mundo de la propiedad intelectual, las marcas tridimensionales emergen como una herramienta poderosa para la diferenciación y protección de productos y servicios. A diferencia de las marcas convencionales, que se limitan a un diseño plano o un logotipo, las marcas tridimensionales abarcan formas físicas y estructuras que pueden ser visualmente distintivas y memorables para los consumidores.
Lo anteriormente señalado tiene una especial relevancia pensando que entraron a legislar sobre este tipo de marcas hace poco mas de un año y estamos viendo que hace poco en territorio nacional estamos obteniendo nuestros primeros registros de esta especialidad.
En este tipo de marcas tenemos ejemplos tan diversos como cajas de chocolate, juguetes, botellas, bebidas, maquillaje, entre otros. Teniendo como especial relevancia al empaque y como se vende la imagen de la marca.
El registro de marcas tridimensionales ofrece numerosas ventajas. Entre ella, brinda a las empresas la oportunidad de destacarse en mercados saturados, donde la competencia es feroz y la diferenciación es clave. Donde la identidad como marca hace la diferencia y que cada espacio e identidad como marca nos hace destacar en un mercado cada vez más globalizado y competitivo.
Los consumidores asocian una forma específica con una marca, se crea un vínculo emocional que va más allá de lo puramente visual. Esta conexión puede influir en las decisiones de compra y promover la preferencia de marca a largo plazo.
La innovación en diseño y fabricación jugará un papel clave en el futuro de las marcas tridimensionales. Donde dependerá de nosotros seguir avanzando en este sentido o quedarnos perplejos ante estos avances o ir protegiendo estas innovaciones.
Hace un par de semanas pudimos ver el caso de capel, donde quiso innovar con una botella en forma de “Moai” donde fue rechazado tanto por INAPI como por el Tribunal de Propiedad Industrial, donde se señalo que no constaba con suficientes elementos distintivos, sino que era a contrario sensu descriptivos o indicativos de un origen que no era real que en este caso acercarlo a un origen de la Isla de Pascua. Por lo anteriormente señalado, debemos tener un especial cuidado y énfasis a que hacemos referencia con este tipo de diseños o a que se puede dar a entender al publico objetivo final, donde se puede prestar para confusiones del mismo y que no generara nuestro objetivo final como marca.
Tenemos multiples casos de éxito para este tipo de marca, como son las reconocidas Crocs o Chocolates Toblerone, que nos sirven de ejemplo para entender la importancia y valor agregado que nos pueden dar estas marcas o hasta perfumes que tienen botellas innovadoras y que muestre la identidad como queremos ser como marca en ese sentido.
Las marcas tridimensionales representan una herramienta valiosa para las empresas en la búsqueda de diferenciación y protección de marca. Sin embargo, su registro y protección requieren un enfoque cuidadoso y una comprensión profunda de los requisitos legales y los desafíos asociados. Con la creciente importancia de la imagen de marca en el mercado global, las marcas tridimensionales están destinadas a desempeñar un papel cada vez más crucial en la estrategia de propiedad intelectual de las empresas.
Cualquier información adicional, por favor, contactarse con José Tomás Leyton Amaya al correo electrónico jleyton@araya.cl
José Tomás Leyton
Abogado Jefe área de Propiedad Intelectual
